En este post de curiosidades gastronómicas voy a hacer un pequeño recorrido por algunos de los cuchillos más característicos del mundo y que además yo mismo uso en mi casa. Sí, como lo oyes, hoy voy a hablar de mis cuchillos de cocina favoritos del mundo 😉
Últimamente y sobre todo porque ahora viajo menos, me estoy dedicando a coleccionar buenos cuchillos de cocina. Ahora que reservo una parte de mi tiempo para cocinar y explorar nuevas técnicas, es fundamental tener un buen juego de cuchillos en el cajón. He pasado de utilizar una puntilla para casi todo a empezar a aficionarme a cuchillos de mayor recorrido, que valen tanto para trinchar o despiezar como para picar una zanahoria en pequeños cuadraditos o una cebolla en brunoise.
El único problema de tener más cuchillos en casa aparece cuando ya te has acostumbrado al corte de un cuchillo occidental de hoja curva y cambias a uno japonés de hoja más plana. Los dos son igual de buenos, pero cada uno necesita de un movimiento de mano diferente para sacarle el máximo provecho al corte.
Y ahora sin más preámbulos os voy a presentar algunos de mis cuchillos favoritos de cocina que además proceden de culturas gastronómicas de diferentes partes del mundo.
Tou
El Tou es el cuchillo multiusos de la cocina china. Un cuchillo de tamaño y peso intermedio, hoja ancha y de forma rectangular al que he encontrado muy útil en diferentes elaboraciones gastronómicas. Su forma se asemeja a la de una pequeña hacha de cocina y aunque es muy versátil cuesta acostumbrarse a su peso y balance.
Este cuchillo ha sido el gran valedor de la cocina china, adaptándose a todo tipo de trabajos culinarios a la perfección, desde el despiece hasta el picado más fino, incluso para cortar los pequeños bastoncillos de madera que antiguamente alimentaban de calor el wok. La curva de aprendizaje es algo elevada pero en cuanto te acostumbras a usar un tou ya no quieres cambiar de cuchillo.
Como detalle recordar que en Vietnam (país en el que he vivido un tiempo) usan enormes machetes peladores de verdura bastante parecidos al tou chino y que además utilizan un pequeño cuchillo con un pelador en el centro de su hoja para pelar y rallar verduras. Un pena que no tenga ninguna foto de estos curiosos cuchillos vietnamitas.
Mezzaluna italiana
Este cuchillo en forma de media luna cuenta con partidarios y detractores a partes iguales. En mi opinión creo que es muy práctico a la hora de picar finamente verduras de hoja, chiles o especias, con la gran ventaja de que al tener las dos manos empleadas en los mangos es prácticamente imposible que te puedas cortar.
Puede ser un poco extraño e incómodo al principio, pero conozco gente que lo ha adaptado en su cocina con éxito y cortan con una rapidez y eficacia que da gusto.
Se podría decir que el cuchillo mezzaluna o medialuna italiano es el hermano pequeño del cuchillo ulu de los pueblos esquimales inuit con el que solo se diferencia en que este último tiene tan solo un mango de agarre en el centro. Los esquimales consideraban el ulu un cuchillo muy útil para trocear pescado en trozos grandes o para pulir grandes bloques de hielo.
Santoku
El santoku es uno de mis cuchillo favoritos, aunque he de reconocer que su hoja casi plana me resultó algo incómoda en un principio, comparado a la forma más curva de la hoja del cuchillo occidental.
Es un gran cuchillo multiusos, con un magnífico balance y que suele venir acompañado de unas pequeñas muescas o tallas en la hoja, una especie de alveolos que ayudan a separar los alimentos pegados a la hoja del cuchillo.
Como buen multiusos sirve tanto para cortar carnes, pescados o verduras y es fundamental cuando llega el momento de dividir un rollo recién sellado de sushi para convertirlo en makis.
Cuchillo Occidental
Para mi el cuchillo occidental es uno de los grandes de la cocina. Más que acostumbrado a la curvatura de su hoja, este cuchillo es uno de mis favoritos para picar finamente todo tipo de verduras. Como todo cuchillo occidental o cuchillo de chef que se precie debe tener un buen guarda manos, una pieza única formada por la hoja y la espiga y una buena cacha que sea cómoda de agarrar.
Para trabajos como pelar o cortar pequeñas piezas tengo otro cuchillo a juego con el de chef pero de menor tamaño. Una especie de puntilla multiusos de filo liso para hacer más cómodos ese tipo de trabajos en la cocina.
Jamonero
El cuchillo jamonero es otro imprescindible en el cajón de los cubiertos de prácticamente cualquier casa. Sobre todo si, como yo, tienes acceso a buenos jamones y paletillas ibéricas, la forma más rica y divertida de disfrutar del jamón serrano.
Este jamonero tiene ya bastantes años. A simple vista puede no parecer demasiado bueno pero la verdad es que bien afilado corta las lonchas de jamón que da gusto.
Puntilla
La puntilla es otro de esos cuchillos a tener en cuenta en la cocina. Es casi imposible apañarse con solo un cuchillo cuando estás todo el día entre fogones por lo que la puntilla es otro indispensable en mi colección.
Ya conté en el apartado de cuchillo occidental que utilizaba una especie de puntilla más pequeña que el cuchillo de cocina tradicional. Además de esa también uso de vez en cuando esta otra puntilla.
En este caso se trata de una puntilla de sierra, que normalmente utilizo para pelar ajos o limpiar alcachofas. Esa sierra dentada puede cortar sin problema prácticamente cualquier producto, incluso huesos pequeños.
Hasta aquí algunos de los cuchillos más curiosos del mundo que conozco, algunos de mi propia cocina, aunque hay muchos más.
Yo por mi parte estoy pensando en comprarme un cuchillo Gyuto, una especie de híbrido japonés entre un santoku y un cuchillo occidental, con una hoja curva similar a la de este último y un balance y diseño más asiático 😉
Y ya sabes, si estás buscando ampliar el cajón de cuchillos de tu casa con utensilios de calidad, probablemente estos cuchillos de cocina puede que te interesen. Yo de momento, voy a ver si al fin me hago con un gyuto para la colección.